Nacimientos
Por Don Aurelio
Indicar el comienzo
establecer el punto mismo
en donde un instante
expande su infinita sustancia
hacia algún destino posible
excede mis capacidades demiúrgicas.
Me limitaré a dejar
que las palabras corran
presurosas detrás de su inmortalidad.
Aunque no seré yo
quien las transforme
en oraciones capaces de conjurar
la nada.
Serán ellas mismas.
Su magia.
Su persistencia
que las redime
de mis inútiles esfuerzos.
Que soberbia de nuestra parte intentar marcar el inicio de una "cosa".
ResponderEliminarEn el fondo, seguramente la cosa ríe.
Seguramente de la cosa salió eso de cuando desperté, el hombre ya estaba allí.
Mariam:
ResponderEliminarSe ríe a carcajadas. A mandíbula batiente.